25 abril 2005

Lazos entre islas

Este fin de semana, además de disfrutar con un concierto de LORRAINE DESMARAIS & ORQUESTRA SINFÓNICA DE GALICIA, cena con unos amigos y amigas, "pelis" en dvd en compañía de la familia, me he puesto a leerlos como ya es habitual, pero lo no habitual es que haya decidido leerme.

Me sigue sorprendiendo la cantidad de coincidencias que tenemos las personas que escribimos y que nos leemos en esta comunidad. Es parte de la belleza que compone este lugar, cada uno de nosotros mostrando, de una manera explícita o no, nuestro interior y a su vez nos unimos por lazos, lazos que no pensan, lazos que se agradecen, lazos que compartimos y mantenemos aún en la distancia, aún en la diferencia, y muchas veces sin conocernos físicamente. Pensamientos que nos unen de alguna manera, porque esas personas con las que nos sentimos identificadas viajan con nosotras y nosotros, estoy convencida de que todos y todas en algun momento del día, de cualquier día, de repente, pensamos en alguien de esta comunidad.

Empecé un trece de enero de este año, me sigo considerando una "novata" de ahí que continuamente tenga preguntas y reflexiones sobre este tema, y lo comente con amigos y amigas, pero sobre todo quién lo entiende bien son las personas que participan de las bitácoras, aunque todas y todos tengamos objetivos diferentes.

No habiendo pasado un mes desde mi comienzo, el treinta y uno de enero, escribí "Espejo" . Hoy, tres meses después, mis pensamientos no han variado, los compañeros y compañeras del bitácoras, si han variado, algunos ya no nos comunicamos, pero es como la vida misma, me apena ciertamente pero cada persona tiene su propia elección. Y otros y otras han llegado, obsequiándonos con su belleza, siempre podemos aprender y compartir, dar y recibir.Y desde aquí, deseo reuniros para deciros gracias. Se me ocurre enumerar por lo menos algún pensamiento que tengo con cada uno de vosotras y vosotros, se me ocurre recordar como os conocí, se me ocurre daros mi cariño y amistad por lo que comparto con vós, todas y todos sabéis en que parte de mi ser os tengo guardados.

Felicidad en Herat

Vine aquí
como escribo estas líneas,
sin idea fija:
una mezquita azul y verde,
seis minaretes truncos,
dos o tres tumbas,
memorias de un poeta santo,
los nombres de Timur y su linaje.

Encontré al viento de los cien días.
Todas las noches las cubrió de arena,
acosó mi frente, me quemó los párpados.
La madrugada:
dispersión de pájaros
y ese rumor de agua entre piedras
que son los pasos campesinos.
(Pero el agua sabía a polvo.)
Murmullos en el llano,
apariciones
desapariciones,
ocres torbellinos
insubstanciales como mis pensamientos.
Vueltas y vueltas
en un cuarto de hotel o en las colinas:
la tierra un cementerio de camellos
y en mis cavilaciones siempre
los mismos rostros que se desmoronan.
¿El viento, el señor de las ruinas,
es mi único maestro?
Erosiones:
el menos crece más y más.

En la tumba del santo,
hondo en el árbol seco,
clavé un clavo,

no,
como los otros, contra el mal de ojo:
contra mí mismo.
(Algo dije:
palabras que se lleva el viento.)

Una tarde pactaron las alturas.
Sin cambiar de lugar
caminaron los chopos.
Sol en los azulejos
súbitas primaveras.
En el Jardín de las Señoras
subí a la cúpula turquesa.
Minaretes tatuados de signos:
la escritura cúfica, más allá de la letra,
se volvió transparente.
No tuve la visión sin imágenes,
no vi girar las formas hasta desvanecerse
en claridad inmóvil,
el ser ya sin substancia del sufí.
No bebí plenitud en el vacío
ni vi las treinta y dos señales
del Bodisatva cuerpo de diamante.
Vi un cielo azul y todos los azules,
del blanco al verde
todo el abanico de los álamos
y sobre el pino, más aire que pájaro,
el mirlo blanquinegro.
Vi al mundo reposar en sí mismo.
Vi las apariencias.
Y llame a esa media hora:
Perfección de lo Finito.

OCTAVIO PAZ

Os quiero ver muy felices, abrazos y besos, risas y miradas, sois un amor.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias a ti también por compartir tu vida, tu camino. Besossss

Anónimo dijo...

Qué maravilloso poema.
Qué la ecuación de la felicidad sea resuelta en su boca.
Abrazos

Anónimo dijo...

Facundo dice,

si olvidaramos todas las pendejadas que nos han enseñado seríamos por lo menos como Octavio Paz, ojalá fuera cierto

besos

Anónimo dijo...

Tantas "coincidencias" en esta playa llena de gaviotas...

Sólo te prometo que lo seguiré intentando, aunque sea tan difícil si uno no renuncia a sus anhelos, si no baja el listón, pero es que yo no sé, y aún así, palabrita del niño Sergi, lo seguiré intentando, ser feliz...

un abrazote.

scape95 dijo...

Pues otro beso para tí, hala!

Anónimo dijo...

Me encanta Octavio Paz (si aú no lo has leído te recomiendo "El arco y la lira" o aún mejor "La llama doble" pero no son poemas sino prosa.
Mirada, coincido en un todo contigo con lo que dices de nuestros lazos en este post. Y sí, si nos releemos es curioso como existen particularidades que nos unen. Y tb es cierto que, día a día, pensamos en los amigos de esta comunidad.
Estos días ando un poco nervi esperando que algo me resulte bien así puedo sentrime más feliz. Si se me da en positivo ya te avisaré. De seguro me traerás suerte.
Yo también deseo verte siempre feliz.
Gracias por estas palabras tuyas.
Un beso, un abrazo.

Anónimo dijo...

He estado leyendo algunos de tus posts, Mirada. Y me alegra haberlo hecho.
Me gustan. Me gusta tu blog. Me gusta lo que escribes y como lo haces. Y la sensibilidad que destila.
Feliz martes.

Anónimo dijo...

...¡Un poema de este gran premio Nobel para brindar por esos lazos que nos unen a través de tiempo y distancia, aunque sea durante breves, pero intensos trayectos!...
SALUDANDO: LeeTamargo.-

Haiduc dijo...

Se te quiere, guapa

MarthePG dijo...

Muy bella descripción de las relaciones entre bitácoras y sobre todo de gente de blogs. Un placer.

besos

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