En mi defensa añadiré que amo la música
y que en estos momentos de vida
trae más colores a mi risa
¡ay.... !
y que en mi corazón, sí,
he conseguido clavar algunas cruces
que me recordarán siempre quién soy.
Porque a los descansos dicen les llaman la despedida,
me deshago por dentro en trocitos,
!ay... !
y que así sea, sí,
en líquidos pedacitos ligeros, ligeros.
6 comentarios:
Gracias a esa música que te hace libre con más colores y risas.Pero no hables de despedidas
Ella es la llave...
deliciosa música,
y viajé hasta aquí y la hemos bailado en la calle empedrada con la brisa de las conchas,
:-)
bona nit,
Despedidas, nada...vamos...osease...ni mentarlas...
Por cierto, te he dejado una sorpresa en mi blog.
Un abarzo enorme
Y es que por más que lo intento, no me imagino la vida sin una buena banda sonora de fondo.
Un placer descubrir tu rincón, con la mirada más clara que nunca.
Besitos de agua
ohhhhh: gracias :-)))
Guapa!
Amén, pronto tu sangre aullará hietérica recogiendo nuevas esencias, y expulsará la piedra. No sé, es lo primero que me ha inspirado, preguntaté a ti por qué. Un saludo
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